Cuando pensábamos, allá por mediados de mayo, que no volveríamos a ver una gota de lluvia en Granada y Sierra Nevada se presentó la meteorología que todos estuvimos esperando en marzo..., Hemos vivido un verano adelantado que afortunadamente ha tenido un paréntesis con abundante lluvia y temperaturas más bien frescas. Nevadas abundantes en la Sierra con cota de 2500 m e incluso 2100 en algún momento. El aspecto de la alta montaña, que ya era plenamente estival, se tornó repentinamente casi invernal...
Uno de los últimos coletazos de este singular mes de junio fue el día 3, cuando una copiosa tormenta aprovechó la base generada durante mayo para dejar una nieve espléndida a partir de 2800 m; tanto es así que creo haber vivido uno de las mejores esquiadas de esta temporada...